Cuando se tienen hijos pequeños, las rabietas y berrinches suelen ser cosas de todos los días. Muchas veces nuestra propia inexperiencia limita nuestra capacidad de criar adecuadamente a un niño; otras veces simplemente caemos y accedemos a los reclamos de nuestros pequeños por simple pereza, para dejar de escuchar las rabietas.
El problema está en que si de pequeños les damos siempre todo lo que desean luego de una pataleta, cuando grandes serán un verdadero dolor de cabeza para nosotros y para la sociedad.
Es por eso que a continuación te traemos cuatro frases que te ayudarán a lidiar con un pequeño que intenta con todas sus fuerzas lograr que se haga su voluntad y romper la tuya.
1. Ya te respondí
Cuando se tienen hijos pequeños, las rabietas y berrinches suelen ser cosas de todos los días. Muchas veces nuestra propia inexperiencia limita nuestra capacidad de criar adecuadamente a un niño; otras veces simplemente caemos y accedemos a los reclamos de nuestros pequeños por simple pereza, para dejar de escuchar las rabietas.
El problema está en que si de pequeños les damos siempre todo lo que desean luego de una pataleta, cuando grandes serán un verdadero dolor de cabeza para nosotros y para la sociedad.
Es por eso que a continuación te traemos cuatro frases que te ayudarán a lidiar con un pequeño que intenta con todas sus fuerzas lograr que se haga su voluntad y romper la tuya.
2. No vamos a discutirlo
Hija: Papá, ¿puedo dormir en casa de mi amiga?
Padre: Hoy no cariño
Hija: Por favor
Padre: No vamos a discutirlo
Hija: Pero a mis otras amigas ya las dejaron sus padres…
Y en este momento te das la media vuelta y te retiras porque, como ya quedó claro, no vas a discutirlo.
3. Esta conversación ya terminó
Es una variante de la frase anterior. Si tu hijo sigue insistiendo solo di “esta conversación ya terminó” y termina la charla. Si aun así continua puedes repetir “esta conversación ya terminó”, o “Ya te respondí”hasta que se dé por vencido.
4. Ya tomé mi decisión, si vuelves a mencionarlo habrá consecuencias
Esta frase es especialmente buena cuando el hijo es muy insistente. Toma el siguiente ejemplo:
Hijo: ¿Puedo quedarme en casa de mi amigo esta noche?
Madre: Hoy no, cariño
Hijo: Por favor
Madre: Ya tomé mi decisión, si vuelves a mencionarlo habrá consecuencias.
Hijo: Pero van otros amigos…
Madre: Te dije que no lo mencionaras más, ahora no podrás usar la computadora por el resto del día. Si lo mencionas de nuevo habrá más consecuencias.
Hijo: ¡No es justo, nunca me dejas hacer nada?
Madre: Te advertí que habría más consecuencias; ahora tampoco podrás usar tu teléfono móvil por el resto del día. Si lo mencionas de nuevo, habrá más consecuencias.
Cierto, es difícil; pero es necesario que mantengas tu voluntad y seas firme. Al final le estarás haciendo un bien y formarás su carácter. Cuando los padres son demasiado permisivos los hijos son incontrolables.
¿Conoces alguna otra frase para evitar que los niños hagan berrinches? Compártela en los comentarios.Recuerda compartir esta valiosa información con papá y mamá y apoyarnos con un Me Gusta.
Fuente: Ciencia bebés